17/10/15

Prefiero estar soltera de por vida que estar con un Grey o un Hardin

Hace tiempo, por si no os acordáis, hice una reseña de After, y me desahogué pero bien y hoy voy a volver a hacerlo pero, esta vez, me voy a quejar de todos los hombres estúpidos de las novelas románticas actuales. 

A ver, no es que tenga nada en contra pero... bueno, sí, lo tengo y es que parece que en los libros ser un cerdo machista que maltrata psicológicamente a la mujer es lo más de lo más y a mí empieza a hartarme. Todo empezó con Crepúsculo. A ver, que a mí me encanta pero reconocedme que Edward era un controlador que necesitaba saber en todo momento dónde estaba Bella y que odiaba que pasara el tiempo con Jacob. Eso podría justificarse un poco porque eran vampiro contra lobo y porque querían matar a Bella. Y porque Jacob bebía los vientos por ella. Vale, es justificable en cierto sentido porque Bella estaba en peligro de muerte pero eso no quita que su confianza con la pareja fuera de menos cien (yo era y soy de Jasper así que me dan un poco igual estos tres) pero con ellos comenzó todo porque 50 sombras es el fanfic de crepúsculo y a Edward le convirtió en el señor Christian Grey, un hombre que detesto. 

Con 50 sombras de Grey se creo el modelo de hombre más repugnante que ha habido nunca (lo siento para las que os guste, pero es que  lo de ese tío no es normal). Lo de Christian no es BDSM porque en esto siempre se respeta a la mujer (al menos es lo que se dice siempre) y Grey, lo siento mucho, pero no respeta en ningún momento a Anastasia (tampoco es que se respete a sí misma). Llega a un punto en el que la aisla, le vigila en el trabajo y a cada lugar que va, incluso tiene su móvil controlado. Le dice cómo se debe vestir, qué debe comer, cómo debe depilarse, qué tiene que hacer y un montón de cosas más que hacen que me pregunte: ¿de verdad queréis esto? ¿De verdad queréis estar con alguien que os hace llorar sin parar y que os controla cada minuto del día? Yo quiero que me quieran, no que me hagan sufrir. 
Con Grey la frase "eres mía" pasó del sentido posesivo horrible al romántico aunque yo no veo la frase nada bonita. ¿Eres mía? ¿En serio? ¿Estamos en la Edad Media o en la Prehistoria? no soy de nadie, no soy un objeto, no soy una propiedad. Soy una persona. Soy un ser humano. Esta frase me recuerda a una canción que decía "tú eres mía o no serás de nadie" donde se veía el asesinato implícito como se fuera la chavala. ¿Queréis eso? ¿En serio? Yo no.

Claro, que no es el único que lo dice. Como a todas las escritoras les debió de parecer una maravillosa frase con un sentido tan tan bonito decidieron incluirlo en todos los libros así que que no os asuste leerlo en todas las novelas románticas. Se ha puesto de moda y es una moda que detesto. Sí, sí, también la suelta el maravilloso Hardin de After, el jardín con malas hierbas de las narices:
Alma de cántaro, ¿por qué tiene que ser tuya? Te quiere y todas esas cosas. ¿Qué más quieres? Bastante suplicio es quererte a ti, con lo inaguantable que eres. Un premio deberían dar a cualquiera que te aguante.

Pero a ver, que Grey no solo puso esa moda. También puso la moda de pedir a tu novia que se case contigo para que no te deje (¡así me gusta, romanticismo ante todo!); en el caso de Hardin fue pedir que se vaya a vivir con él para aislarla de todos y que así no le cuenten lo mala persona que es y le deje. ¿Veis? Puro romanticismo todo. Qué bonito todo. Otro hombre, las chicas del blog no conseguimos recordar en qué libro, tira las anticonceptivas a la basura para que su chica se quede embarazada y no le deje. ¡Qué buen motivo para tener un hijo! ¿Os imagináis la conversación? Yo sí y me da pena el niño. "Papá, cuéntame cómo decidisteis tenerme" "Oh, verás hijo, pensé que tu madre me iba a dejar así que le obligué a tenerte".
 
Precioso. Lloro con el romanticismo y la poca posesividad de la pedida.
Pero no solo vamos a mirar el rollo romántico, también hay que decir que todos son unos salvajes, unos bárbaros, unos agresivos que dan miedo. De verdad que yo estoy con uno de estos y estaría pensando todo el día cuándo va a estallar y pegarme una paliza, porque de verdad pienso que lo que no nos cuentan en el libro son las palizas que les meten. Hardin se pega. Grey se pega. Travis se pega. ¿Que no sabéis quién es Travis? Es el de Maravilloso desastre, un título que refleja muy bien el contenido del libro, aunque yo le quitaría lo de maravilloso. El chaval es un boxeador de peleas ilegales. La verdad es que yo siempre he creído que los boxeadores luego son unos amorcitos con sus chicas, que las quieren y las miman y que respetan a las demás personas, que les dejan su espacio vital y todo eso (en plan como los de rugby, que son un tanto bestias pero luego son unos amores fuera del campo) pero Travis no. Es un encanto: 
Muy tierno, ¿no? Cualquiera quiere tenerlo de amigo, claro.
Pero ya no es solo violencia, es que además se pasan todo el día bebiendo y acosando a la chavala mientras están borrachos porque ¡quién no quiere ver a su novio diciendo cosas horribles tras vaciar una licolería! Todas queremos eso, por supuesto. Yo estoy deseando que venga un hombre a gritarme de todo menos cosas bonitas, es el objetivo principal de mi vida. Por supuesto.

Luego también está lo de la confianza. Ninguno confía en su chica, pero ni uno, ni el más atrevido sexualmente. Es algo que parece que no va en su adn. Ellos pueden acostarse con cualquiera pero ellas no, incluso cuando ni siquiera están saliendo. Ellos tienen que saber en todo momento dónde van a estar, con quién, cuando, cómo, quién va a llevarlas... y como queden con un chico ¡el demonio! como tuvieras amigos antes de conocerle ¡aléjate, satanás, qué haces con amigos, fuera fuera! Tienes que estar sola, no vaya a ser que quedes con tu mejor amiga a tomar un café, se te vaya la pinza y decidáis en el último momento iros a París a ligarte a unos cuantos franceses. ¡Y tener amigos hombres! ¡Qué desfachatez! ¿Desde cuándo las mujeres y los hombres son amigos? Cómo se atreven, qué descarados. Todos los hombres quieren acostarse con cada mujer que conocen y al revés, las mujeres también. Con todos toditos. Por favor, qué cosas pienso. Que puedes tener amigos, ¡pobre de mí! Eso si, intenta tú controlarles a ellos y verás el lío que te montan. Conmigo lo tendrían un poco mal, los pobres, básicamente porque la mayoría de mis amigos son chicos.



Luego también está la parte del sexo. ¿Que eres virgen? Por favor, cómo osas no haberte acostado con alguien, pero qué demonios has hecho con tu vida que no te has ventilado a cada ser humano que se te ha puesto delante. Eso sí, como no lo seas eres la guarra. En los libros no se aclaran. No quieren a la virgen pero tampoco quieren a la que se ha acostado con alguien. ¿Qué demonios? ¿En qué quedamos? Además, incluso en los juveniles, tienes que ser la más atrevida del mundo. ¿Y que no te apetece acostarte con él ese día? Pues te aguantas y lo haces, que el hombre tiene que ser satisfecho y tú no puedes decir que no. ¿Que quieres seguir siendo virgen? Pues te aguantas y dejas de serlo, porque cómo va a estar sin sexo el señorito. Eso sí, gracias a lo que me han contado dos de nuestras chicas de bloggerizados, las chicas tienen que hacer un montón de guarradas que ellas pueden querer no hacer pero como hay que hacer feliz al hombre pues lo hacen, también tienen que aguantar ver cómo él se acuesta con otras personas y sonreír, tan felices. ¿Que no te gusta? Pues tranquila, mujer, que él va a obligarte en cierta forma para que te encante y adores hacer cualquier cosa que no te gusta. ¿Que a él le va pegarte y a ti no? Pues también te aguantas, te tiene que gustar que practique todo lo que sea contigo, que te mande y que te humille todo el tiempo. 

Y tú dejar de ser un estúpido tonto del culo
¿Os acordáis de esos regalos monísimos que han hecho las parejas toda la vida? Que si una flor, que si un disco, que si un libro, un vestido porque se han acordado de ti... ¿os acordáis, no? Pues gracias a estos libros también están empezando a disgustarme. En este tipo de novelas ellos no te regalan algo por romanticismo, te regalan algo para sustituir lo que a ellos no les gusta. ¿El vestido? Su ponte este vestido para esta noche no es un gesto bonito, es un "ponte esto porque odio tu ropa y te ordeno que te vistas de tal forma porque tu ropa normal es de una santurrona... ah, si vas sin bragas mucho mejor". Regalan coches, casas, ropa carísima, accesorios carísimos y mil historias con la intención de sustituir todo lo tuyo por algo que a ellos les gusta. ¿Que te gustaba tu viejo coche? Pues te aguantas y te doy uno nuevo (Edward también se lo hizo a Bella en amanecer, ¿os acordáis?). ¿Que te gusta tu fondo de armario? Pues no, porque o es muy fresco o muy monjeril así que mejor te pones lo que yo te ordene. Ah, que te eligen hasta la ropa interior. Eso de ir cómoda no es lo suyo, tienes que ir con lencería incómoda (al parecer la más incómoda del mundo) y te la regalan, algo que a mí nunca me ha gustado. Nuestra ropa es cosa nuestra, pero sobre todo la interior, no sé.

Algo que también me hace gracia es que son todos los chicos maltratadores súper cultos. Sí sí, es como si así justificaran algo. Grey toca el piano y es súper súper inteligente (por eso dirige una empresa, claro) y Hardin es editor, sabe muchísimo de literatura (y lee a Tolstoi, no olvidemos que remarcan cada autor que lee como si así se demostrara algo) y  mientras grita suelta referencias literarias. El resto también, son todos inteligentes, ricos y saben de todo. La mayoría también vienen de hogares rotos y justifican su agresividad con el divorcio de los padres. Me parece un insulto, por cierto, para los hijos de padres divorciados que son unas personas completamente normales. De verdad.

Hay mil cosas más. A mí estos hombres me parecen un insulto a la inteligencia. ¿De verdad queréis novios maltratadores y controladores? ¿De verdad queréis salir con alguien que no respeta vuestro espacio ni a vuestros amigos? ¿Es lo que queréis? ¿Salir un día en las noticias como una víctima más? Pues yo, sinceramente no. Para eso prefiero estar soltera de por vida, porque para tener un novio que va a ser más mi carcelero que alguien que me quiere pues mira, no como que no me van esas cosas.
¿Veis qué diferencia? Se ha enamorado de ella y de su personalidad y de su todo
A mí me gustan los chicos buenos. Los que te quieren. Los que son a la vez tu mejor amigo y tu novio. A mí me gusta Levi de Fangirl, un chico maravilloso que hace que parezca que vives en las nubes. Respeta a Cath y antes que cualquier cosa es su mejor amigo, le gusta oírla leer en voz alta y la acompaña a los sitios pero sin pasar la raya de acosador controlador (o sea, cuando está súper oscuro y puede aparecer un violador en cualquier momento). Y no trata de cambiarla, no lo intenta, la quiere tal y como es. También me gusta el señor Darcy, pero no el que se ha inventado la gente como ha querido, a mí me gusta el señor Darcy introvertido, incapaz de hablar con la gente que no conoce y que adora a Elizabeth aunque intente fingir que no, que es educado, que cuando sonríe se ilumina todo, y que cuando se da cuenta de que la quiere sabes que haría cualquier cosa por ella.

Bueno, que a mí me gustan los chicos buenos, los sensibles, los que te quieren y te lo demuestran, los que no aguantan nueve horas sin verte porque adoran estar contigo, los que te respetan, los que te aceptan tal y como eres, los que harían cualquier cosa por ti, los que te escuchan, los que hacen pensar que vives en una nube. Y hasta que no nos enamoremos un chico bueno y yo prefiero estar soltera que aguantar veinte Hardin, Grey o como se llame el de la novela machista de turno. Y sí, hasta que no encuentre uno al que le gusta que lea cuando esté con él pues mira, que tampoco.

¿Os gustan los Grey o preferís a los chicos buenos? Venga, responded, no tengáis miedo.

 ¿Algún chico bueno? Podéis decirlo también, pero preparáos para la avalancha de mujeres que van a enamorarse de vosotros.


Ya sé que iba a publicarla el lunes, pero no he podido aguantar las ganas.


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